<p><strong>Drones ucranianos</strong><strong>atacaron una factoría en Izhevsk</strong>, junto a los Urales, causando tres víctimas mortales. El jefe de la república de Udmurtia, Alexander Brechalov, no especificó de qué tipo de empresa se trataba, pero el canal ucraniano de Telegram Exilenova+ señaló que el objetivo de los drones podría haber sido la <strong>Planta Electromecánica Kupol</strong> de Izhevsk, en la capital regional, que recibe pedidos del Ministerio de Defensa ruso y, entre otras cosas, suministra sistemas de misiles antiaéreos y de entrenamiento de objetivos.</p>
El objetivo de Kiev pudo ser la Planta Electromecánica Kupol, que recibe pedidos del Ministerio de Defensa de Rusia
Drones ucranianosatacaron una factoría en Izhevsk, junto a los Urales, causando tres víctimas mortales. El jefe de la república de Udmurtia, Alexander Brechalov, no especificó de qué tipo de empresa se trataba, pero el canal ucraniano de Telegram Exilenova+ señaló que el objetivo de los drones podría haber sido la Planta Electromecánica Kupol de Izhevsk, en la capital regional, que recibe pedidos del Ministerio de Defensa ruso y, entre otras cosas, suministra sistemas de misiles antiaéreos y de entrenamiento de objetivos.
Según las autoridades de la región, tres personas murieron como consecuencia del ataque. Además, 35 heridos fueron hospitalizados, 10 de ellos en estado grave. Entre las víctimas se encuentra un niño, cuyo pronóstico es moderado. El presidente ruso, Vladimir Putin, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y deseó una pronta recuperación a los heridos.
Las unidades de defensa aérea de Rusiadestruyeron 60 drones ucranianos durante la noche, dijo el martes el Ministerio de Defensa ruso. La mayoría de los drones fueron destruidos en regiones del suroeste de Rusia y en la península de Crimea. Pero la peor parte se la llevaron en Izhevsk, que está situada a 1.200 kilómetros de la frontera ucraniana. Según Brechalov, a primera hora de la mañana los bomberos seguían «eliminando los focos del incendio».
Izhevsk alberga uno de los arsenales más famosos de Rusia, donde el histórico Mijail Kalashnikov diseñó su famoso fusil de asalto AK-47. Durante la época soviética, Izhevsk era una ciudad cerrada, con acceso restringido para los no residentes. Kupol es una de las mayores empresas de la industria de defensa de Rusia. Por eso ya en noviembre de 2023 un ataque con drones dañó esta fábrica militar en Izhevsk, destrozando ventanas e hiriendo a una persona en una instalación que producía vehículos aéreos no tripulados y equipos de defensa. Sancionada por la UE, EEUU, Canadá y Suiza, la fábrica está acusada de suministrar armas para apoyar la invasión rusa de Ucrania. Desde julio de 2023, fabrica drones Garpiya-A1 con componentes chinos.
La región está en la mirilla de los ucranianos. En Udmurtia todavía recuerdan cómo una gran explosión dañó la fábrica de armas de Votkinsk, la noche del 7 de febrero de 2024. Fue atacada la planta de construcción de maquinaria que produce componentes para armas nucleares y misiles balísticos, incluido el misil balístico intercontinental RS-24 Yars.
Debido a los ataques con drones, se impusieron restricciones en el funcionamiento de los aeropuertos de Saratov, Ulianovsk, Kazan, Nizhnekamsk e Izhevsk tanto por la noche como por la mañana.
El Ministerio de Defensa ruso solo informa de los drones destruidos por sus fuerzas, no del número de drones lanzados por Ucrania. Pero Kiev sigue tratando de debilitar a los rusos desde dentro. Este fin de semana, Ucrania afirmó haber llevado a cabo un ataque con drones durante la noche en el aeródromo de Kirovske en Crimea y afirmó que varios helicópteros rusos y un sistema de defensa aérea fueron destruidos en el ataque. Según un comunicado del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), los drones arrasaron zonas donde se encontraban unidades de aviación rusas, medios de defensa aérea, depósitos de municiones y vehículos aéreos no tripulados. La agencia afirmó que helicópteros Mi-8, Mi-26 y Mi-28, así como un sistema de misiles y cañones Pantsir-S1, fueron destruidos. «El enemigo debe comprender que el costoso equipo militar y la munición no están seguros en ningún lugar: ni en la línea de contacto, ni en Crimea, ni en la retaguardia», proclamó el SBU.
Esta semana, Ucrania está perseverando en esa estrategia de debilitar la retaguardia rusa. Según el recuento del Ministerio de Defensa ruso, durante la noche del 1 de julio, los sistemas de defensa aérea en servicio destruyeron e interceptaron 60 drones ucranianos en Crimea (donde derribaron 17) además de en Rostov, Kursk, Saratov, Belgorod, Voronezh y Oriol. En ninguno de estos casos hubo heridos. También fueron interceptados 11 drones sobre el mar de Azov y sobre el mar Negro. En Taganrog, según informaron las autoridades locales, un ataque con drones rompió las ventanas de un edificio de apartamentos y dañó varios vehículos.
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