<p>El presidente de la República italiana, <strong>Sergio Mattarella</strong>, se encuentra estable tras haber sido operado del corazón este martes para implantarle un marcapasos en el <strong>hospital Santo Espíritu</strong> en Roma, según han informado este miércoles fuentes oficiales.</p>
Se trataba de una intervención programada y el presidente de la República italiana estaba trabajando durante las horas previas a su ingreso hospitalario
El presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, se encuentra estable tras haber sido operado del corazón este martes para implantarle un marcapasos en el hospital Santo Espíritu en Roma, según han informado este miércoles fuentes oficiales.
Tras concluir la intervención, que tuvo lugar sobre las 20:00 horas, Mattarella, de 83 años, volvió a planta. Fuentes del Palacio del Quirinal han confirmado que Mattarella se encuentra «asintomático y en condiciones clínicas estables» y que ha pasado una noche «tranquila». Según los medios italianos, el presidente podría recibir el alta a partir de las 48 horas siguientes a la intervención, es decir, entre hoy miércoles y mañana jueves. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, le ha deseado lo mejor al jefe del Estado, asegurando que «Italia lo espera muy pronto, con la fuerza y la entrega de siempre». El resto de líderes políticos también mostraron sus mejores deseos de recuperación para el presidente, que lleva nueve años al frente de la jefatura del Estado italiano.
La hospitalización del jefe del Estado italiano causó sorpresa y cierta preocupación, pues no se había informado de la misma y sólo se supo después de que anunciase la cancelación de un acto previsto para este miércoles en la sede de la presidencia de la República.
Sin embargo, se trata de una operación ya prevista y no de una urgencia y el estado del presidente es bueno, hasta el punto de que Mattarella estuvo trabajando con normalidad durante las horas previas a su ingreso hospitalario, cuando recibió al primer ministro de Montenegro, Milojko Spaj.
Según los medios, es probable que haya experimentado en las últimas semanas algunos problemas cardíacos menores y que la pausa vacacional por la Semana Santa haya determinado el momento de la intervención.
La operación consistió en la inserción de un marcapasos que interviene cuando se produce una ralentización cardíaca, sustituyendo el impulso eléctrico, y su recuperación es inmediata. Según los cardiólogos consultados por la prensa italiana, el presidente deberá guardar reposo durante una semana de convalecencia.
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